Mi experiencia que tuve al trabajar en este proyecto tan grande es que es diferente a solo planearlo, que el llevar la dirección y control. Que, sin duda, en una actividad que requiere que todas sus partes estén coordinadas y que si una falla, no por eso se dejará caer todo el proyecto, se debe buscar la forma de cómo salir de esa falla para que se realice de forma correcta.

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En mi experiencia con mi equipo me tocó ser los encargados de hacer las constancias para los invitados que eran los 15 empresarios, alumnos que participaron en este proyecto, maestros investigadores a cargo del desarrollo de este proyecto  y de igual forma las constancias de  Carla Morales Ariza  presidenta de la Comisión Nacional de Mujeres Industriales y Waldo Carrasco Hurtado Presidente de la CANACINTRA de Tabasco.

Al principio siendo honestos pensamos que era tarea fácil y que no tendríamos que hacer mucho, nuestra labor consistía una vez que la maestra nos pasaba la lista de 7 grupos de diferentes especialidades, nosotros teníamos que ir a verificar cuantos y quienes de los alumnos ya no asistían o se había dado de baja, para que no se le realizara sus constancias.

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El equipo se dividió en grupos. Mi compañero Ángel suriel y su servidor nos encargamos de los grupos del lunes y Erick y Néstor se encargaron de los grupos del martes. El día que me tocó a mí, me dormí y dejé solo a mi compañero y este solo pudo tomar la lista de los grupos de 9 a 11 a. m. y el de 11 a 1 pm. Al día siguiente mi compañero Erick llegó tarde y no pudieron verificar ningún grupo. Me tocó ir día y buscarlos. Todo normal, me costó buscar los grupos. Pero hubo que no sabía dónde era y apliqué la de esperar a la maestra hasta que saliera de la sala de maestros para irme con ella y verificar esa lista. Llegué, me presenté y recuerdo que la maestra me dijo: “Diles a qué vienes”. Al pasar el nombre de un compañero, noté que no me querían decir que el muchacho no llegaba y en eso la maestra dijo al salón: «»Yo no he visto a ese muchacho y si coopero en su trabajo, ni ha asistido; por lo tanto, Enrique ese no tiene derecho a constancia«»«». Claro que en ese momento yo noté cómo el equipo en el cual él era parte dudaba en decirme que él faltaba mucho, y algunos, como que me decían entre labios, que él no llegaba a clase. Ese día me sentí extraño porque podrían decir que por mi culpa el muchacho no iba a tener constancia, pero a la vez igual pensé que no es justo que unos se esfuercen y que llegue al final uno que no hizo nada y también tenga la misma calificación.

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Ya el día del evento, igual traté de ayudar a mis compañeros en lo que pudiera. Platiqué con la famosa Keyla, el evento fue un éxito. Ya terminado, ayudé a dejar limpio la sala anfeta y sin duda se siente bien que un evento de esa magnitud haya terminado bien.